2024: año nuevo y nueva concepción del espacio laboral

El panorama del mundo de la oficina y del diseño sigue evolucionándose: nacen nuevas exigencias y, en consecuencia, las novedades en este ámbito son constantes. Ya en el horizonte vislumbran espacios oficinas diferentes y en continua transformación. Color, luz natural, mobiliario de oficina funcional y de diseño, centralización del individuo: estas son las nuevas palabras llaves de las empresas al paso con la época moderna.

Solo estamos a principios del 2024 y en las oficinas tiene prioridad la realización de espacios dedicados a la colaboración y a la creatividad compartida: áreas de descanso y espacios abiertos con muebles específicos, como mesas ajustables en altura, sillas operativas y ergonómicas, mamparas fonoabsorbentes para minimizar la contaminación acústica, mamparas divisorias de cristal, pequeños sofás y sillones. Al mismo tiempo no faltan ambientes silenciosos y tranquilos para concentrarse en silencio con puestos equipados y asientos cómodos.

Contribuyen al equilibrio laboral y a la atención los colores de las paredes, de los muebles y de los objetos. El color de año para los muebles de interior es el Peach Fuzz, un tono cálido entre el rosa y el naranja, que refleja el deseo de bienestar, integración e intercambio. Es el color ideal para ambientes de trabajo que favorecen tanto la socialización como la concentración.
De hecho, este año la tendencia es la de hacer que el espacio laboral sea un lugar agradable, del que inspirarse. De ahí que el color, la iluminación, la temperatura y los acabados de los muebles resaltan y toman importancia.

Igual de importante es la realización de diseños versátiles, que ofrecen soluciones modulares para personalizar los lugares según las necesidades. Las empresas más grandes, que no tienen problemas de espacios, están creando áreas dedicadas a las necesidades de los empleados: servicios de niñeras y tutoría para estudiantes, guardería, gimnasios, áreas descanso y mucho más.

El individuo se encuentra en el centro del espacio laboral, el cual rodea en torno a sus necesidades. De hecho, para la empresa moderna es muy importante no solo atraer talentos que generen productividad, sino también conservarlos. Para que esto ocurra, es fundamental garantizar un clima laboral positivo, donde las personas puedan sentirse satisfechas y seguras, un lugar que les permita crecer profesionalmente, incluso mediante cursos de formación y especialización de cada uno.

“FEELING AS BUSY AS A BEE” – LA SÍNDROME DE LA ABEJA OCUPADA: PRODUCE DEPENDENCIA, LEER ATENTAMENTE LAS CONTRAINDICACIONES

Aquí estamos, en fila india hacia nuestros puestos de trabajo, con las aletas y las gafas colgando del clavo en las fotos de verano, que ahora dejan espacio a mochila, ordenador, reuniones y rutina escolar. Volvemos al papel de trabajadores, padres, deportistas, creativos ilusionados y viveur. En este carrusel de deberes, compromisos y responsabilidades, nuestra identidad profesional coincide a menudo con nuestra identidad personal y la razón es una: porque pasamos mucho tiempo en el trabajo, que sí define y mejora nuestra eficacia personal, pero, ante todo, el trabajo es (¡¡¡alerta de spoiler!!!) una HERRAMIENTA para vivir y sustentarnos.

Además de tentempiés y auriculares, en nuestra mochila llevamos los prejuicios de la sociedad capitalista por los que es difícil disociar el concepto de trabajo de lo de productividad y sacrificio, y mucho menos sustituirlo por completo por el de trabajo-descanso-mejor eficiencia. Sin embargo, este es uno de los propósitos de Trainect Wellbeing, que se podría imaginar tan valiente como “La libertad guiando al pueblo” de Delacroix al difundir la psicología y la cultura del bienestar. En la misma línea, parece emprendedora la multinacional de asesoramiento “Mckinsey & Company”, que ha presentado un informe sobre los costes empresariales en el que afirma que un empleado descasado puede ser más productivo, e ironiza al afirmar que “el camarón que se duerme no se lo lleva la corriente y también toma liderazgo”: ¿suena atrevido? ¿O se trata de una visión no miope de cómo el descanso también – y especialmente – en el trabajo, junto con unos horarios laborales flexibles, puede ser la llave para un equilibrio entre vida laboral y vida privada mucho más saludable y sostenible?
A este respecto, los datos del Instituto Nacional de la Salud hablan claro: en Italia el déficit de sueño hace perder a las empresas una productividad de hasta 5 mil millones de euros al año, lo que equivale al 0,5% del PIB.

Y entonces, ¿cómo no estigmatizar la cultura del descanso sin parecer vagos? De forma previa y continua: “make sure to rest, before you really need to”, trabajando por prioridades, favoreciendo el teletrabajo, aumentando las pausas, intentando aplicar soluciones como el “power nap o nap room” preferiblemente entre la 1 y las 3 de la tarde, con una duración variable entre los 20 y los 30 minutos: de hecho, ha sido demostrado que el power-nap actúa como un estimulador de energía, mejorando las actividades del hemisferio derecho y la creatividad.

En cambio, en la otra cara de la moneda está el workaholism, es decir una vida centrada en el trabajo, el agotamiento y, en consecuencia, el moverse como equilibristas borrachos entre actividad laboral, aficiones y deberes, convirtiéndonos en dobles multitareas. Este último término, en concreto, procede de la informática: sin embargo, nosotros no somos ordenadores, no funcionamos, no somos máquinas, no producimos; lo que nos caracteriza es la intencionalidad, pensar, elegir, decidir. Trabajar en estado de “urgencia” es una trampa, un engaño, no todo puede ser urgente, no todo puede ser prioritario. Priorizar hace que uno sea más consciente y mejora la eficiencia; no obstante, esto es posible cuando a la base existe una cultura subyacente de bienestar corporativo. La empresa no es una entidad genérica, sino un conjunto de personas: por lo tanto, es esencial que el jefe aplique la lente del “People center” y solo centrándose en las necesidades de las personas, comprendiendo el impacto emocional che el ritmo laboral suscita en sus vidas, se habrá la verdadera transformación, paso a paso.

Y llegamos al punto de inflexión, que conlleva una toma de consciencia y un mea culpa: siempre estamos listos para acoger neologismos ingleses para que cualquier iniciativa parezca más atractiva y sofisticada. Que seamos igualmente acogedores hacia aquellas iniciativas que sí podrían resultar raras, pero quizás necesarias, tratamos de acoger esas soluciones “valientes”, propias de empresas líderes como Google, Zappos, Cisco, P&G… empezamos, por supuesto, desde lo pequeño, para que la inspiración a ciertos arquetipos laborales haga la diferencia a nivel mundial.
Sí, ¿pero a partir de qué?

Restablecemos las prioridades: tratar el trabajo como UNA HERRAMIENTA para comprar el tiempo libre, no es menos noble, sino quizás más sano. Trabajar con (y para) quien piensa lo mismo, no es suerte, sino la nueva revolución, de la que Delacroix (¡de verdad!) haría un estandarte y, quizás, esa Libertad que corre rápido, la pintaría más relajada.
Es curiosa la expresión inglesa “Busy as a bee”: ocupado como una abeja… con el debido respeto al ecosistema, siempre me han desagradado las abejas, pero las reconozco como las fundadoras del trabajo en equipo, la organización y la concentración en los objetivos. Aprendemos de ellas estos principios, porque un buen trabajo en equipo nos hace menos ocupados y más activos en nuestro ecosistema humano.

fuente:
d.ssa Marika Lupi

La elegancia y la excelencia italiana de Mascheroni en la villa más grande y lujosa de Inglaterra

El ”Made in Italy es sin duda la característica que más destaca de la enorme y lujosa villa de Updown Court, construida en Inglaterra, en el pueblo de Windlesham, en el Surrey.
Con sus 105 cuartos, es más grande que el Buckingham Palace; está rodeada de 230.000 metros cuadrados de jardines y bosques, cinco piscinas, un campo de squash, uno de tenis y un sótano. En el interior hay 24 habitaciones, cada una con su propio cuarto de baño, ocho suites y un ático con dos apartamentos separados. Luego, no faltan una sauna, un gimnasio, un campo de fútbol al interior y un patio ecuestre con establos.

Updown Court es un auténtico triunfo de la italianidad. Para su construcción se emplearon más de treinta tipos diferentes de mármol italiano: «Lo hicimos todo: desde los cimientos hasta el tejado» declaró con orgullo Egidio Palumbo, contratista de obras de Latina que vive y trabaja en Londres desde 1996 y que se encargó de la obra. El dueño, Leslie Allen-Vercoe, también confirma: «Aquí todo procede de Italia: durante dos años recibimos dos o tres camiones a la semana llenos de material».
Las obras empezaron en 1998. Al principio, había 24 albañiles italianos que, despacio, llegaron a unos 60 entre carpinteros, herreros y marmolistas. Durante las obras también se instaló una cafetería en el parque, con un cocinero – obviamente – italiano.

En el templo del estilo italiano, no podía faltar, naturalmente, el mobiliario artesanal y de lujo de la marca Mascheroni, conocida en todo el mundo por la alta calidad de sus muebles tapizados. Mascheroni amuebló el cine en casa Updown Court con unas cinquenta butacas modelo Hollywood y con despachos, mesas y sillones de conferencia.

El sillón Hollywood, cuyo nombre hace referencia al templo del cine en Los Ángeles, es un asiento versátil, funcional y muy elegante, aún siendo sencillo y lineal. Tapizado en piel de primera calidad, dispone de un mecanismo que permite obtener la posición deseada a través de un botón que reclina el respaldo y, al mismo tiempo, levanta el reposapiés. El armazón es de madera maciza y metal, y la tapicería de goma a prueba de golpes. Cada sillón, totalmente artesanal, lleva una placa grabada «Mascheroni srl made in Italy» que certifica su autenticidad, ya que sigue siendo una de las pocas marcas que dirige y controla directamente todo el ciclo de producción, garantizando una calidad absoluta en todas las fases, desde la selección de las materias primas hasta la producción y los servicios personalizados.

Cotrabajo: una nueva forma de concebir el espacio de trabajo

A partir de la economía colaborativa, es decir la economía del compartir, gana terreno el cotrabajo: el espacio de trabajo compartido donde bienes, servicios y áreas de trabajo se ponen a disposición de varios profesionales, autónomos y empresas. Se trata de una nueva forma de trabajo que favorece la convergencia de competencias y talentos en lugares diferentes.

El primer ejemplo de cotrabajo se remonta al 2005 en San Francisco, cuando el ingeniero informático americano Brad Neuberg buscaba una manera para ser independiente mientras trabajaba en un espacio que tuviera todas las comodidades de una oficina. A partir de ese momento, el cotrabajo se difundió en los EE.UU y también en Europa. Llegó a las grandes ciudades italianas en el 2008 y en el 2021 Italia podía contar con 779 espacios de cotrabajo por todo el país.

Ahora bien, ¿cuáles son las ventajas del cotrabajo? En primer lugar, se registra una limitación de los gastos. Por supuesto, alquilar un escritorio en un cotrabajo es más barato que alquilar una oficina entera en una ciudad. Además, esta forma de trabajo en remoto permite encontrar nuevos colaboradores y unir energías, ideas y proyectos aumentando la productividad y evitando el aislamiento que conlleva el teletrabajo en casa.

Sin embargo, optar por trabajar juntos, aunque llevando adelante actividades independientes, implica pensar en la oficina y en el mobiliario de oficina de forma estructurada y organizada para compartir tanto el espacio de trabajo, como las ideas de personas que no forman parte de la misma empresa. Encontrar un espacio de trabajo confortable, con muebles ergonómicos y equipamiento profesional, que responda a las diferentes necesidades de trabajo, animará al trabajador autónomo a volver una y otra vez.
Una oficina de cotrabajo requiere una planta abierta, escritorios ajustables y con varios puestos, asientos ergonómicos que se adapten a diferentes complexiones, conexión a Internet, herramientas como teléfonos, impresoras y ordenadores; sala de reuniones, zona de descanso y aire acondicionado.

Arper, por ejemplo, contribuyó con energía e innovación a amueblar el Palazzo della Luce de Treviso, un elegante edificio histórico que se remonta al siglo XVI, restaurado tanto exteriormente, para conservar su historia, como en las tres plantas del interior, donde hoy en día albergan oficinas, eventos y proyectos. De hecho, en su interior hay un espacio dedicado al cotrabajo, donde empresas, directores, grupos de estudio y profesionales disfrutan de espacios que estimulan la colaboración y el debate, sin renunciar a su privacidad.
Los materiales y el mobiliario se eligieron con meticulosidad para transmitir el mensaje que el cotrabajo pretende destacar. Asientos, sofás y mesas Arper amueblaron espacios individuales, zonas de reunión y áreas de descanso con sostenibilidad y un diseño completamente hecho en Italia.

Muebles de oficina Italianos, colores y materiales: las tendencias del 2023

Para el mobiliario de oficina Italiano, el 2023 está marcado por algunas palabras clave: esencialidad, orden, elegancia, innovación y confort. El diseño exige espacios limpios, armonía y equilibrio.
Los ambientes se diseñan para dar sensación de libertad, comodidad y creatividad, con espacios más aireados y multifuncionales, y muebles como sofás, escritorios y librerías tienen formas suaves y sinuosas.

En las zonas de trabajo, el estilo escandinavo está muy de moda, respondiendo perfectamente a la necesidad de comodidad y funcionalidad requeridas. Este estilo busca muebles con líneas limpias en sus geometrías, que son esenciales y permiten la colaboración entre espacios de trabajo.

Fundamental es la división del espacio en la oficina abierta. Al entrar en una oficina, de hecho, es necesario comprender inmediatamente qué zonas están dedicadas a la socialización y la relajación frente a las adecuadas para el trabajo individual. Este diseño integrador también concede gran importancia a la luz, que debe ser lo más natural o igual posible.

Así pues, el estilo «minimal» es la tendencia de decoración por excelencia para el 2023. Se trata de un estilo riguroso, sin decoración superflua, que privilegia los muebles prácticos, sobrios y transversales, de diseño sofisticado, dispuestos en un orden claro, para permitir la libertad de movimientos y dar amplitud al contexto. El lema «menos es más» triunfa tanto en los espacios de oficina como en los domésticos.

También los colores dan espacio a la frescura y el dinamismo, para crear ambientes positivos y llenos de vitalidad. Entre los colores más populares están los azules y verdes, inspirados en la naturaleza, o los tonos tierra para crear un estilo más sofisticado e inusual. Así, los colores cálidos y los fríos crean juegos de tonalidades que nunca cansan. Colores neutros claros y contrastados, en gradaciones que aumentan la luminosidad de las estancias, resaltando el mobiliario.
En cuanto a los materiales, los más en boga este año son el mármol, el metal y el cristal, que garantizan brillo y, sobre todo, elegancia atemporal.

Por supuesto, la calidad y la sostenibilidad de los materiales siguen siendo de suma importancia en el mobiliario de 2023. Se utilizan materiales reciclados y vintage y se sigue el principio de las tres erres: reducir, reutilizar y reciclar, sobre todo en los métodos de producción de muebles, que deben ser sostenibles, éticos y certificados.

Confort y sostenibilidad en la empresa moderna

En los últimos años, las empresas han cambiado la forma de utilizar la oficina física, dando lugar a nuevas tendencias.

En 2022, la seguridad, la funcionalidad y la sostenibilidad se imponen en el diseño de oficinas. Se están diseñando entornos más flexibles para adaptarse a las nuevas normas de trabajo.

Según el Instituto NBER, la Oficina Nacional de Investigaciones Económicas de E.U., cerca del 70% de las empresas mantendrán de forma permanente un entorno de trabajo híbrido que se ha extendido durante la pandemia, apoyando al personal que trabaja tanto dentro como fuera del entorno de la oficina.

Muchos trabajadores se han acostumbrado a trabajar desde casa, por lo que ha surgido la necesidad de llevar también a la oficina algo de la comodidad, la tranquilidad y la libertad del hogar. Por eso se crea más espacio en las empresas para zonas de reunión, pausas y esparcimiento del personal; la oficina física sigue siendo un importante centro de referencia y encuentro para empleados y clientes. La «zona lounge» se convierte en el centro neurálgico de la oficina moderna: un espacio separado de la zona de trabajo y dotado de comodidades y servicios en el que los empleados y los visitantes externos pueden relajarse, pero también realizar reuniones de trabajo con total libertad. Antes, esta zona estaba dedicada a la espera, ahora es una zona acogedora con un mobiliario cómodo y original como sillas lounge, sillones y sofás.

Además de crear espacios alternativos, la moderna empresa emprende un camino para minimizar el impacto medioambiental en todos los aspectos. También los consumidores se fijan más en las empresas que prestan atención a su compromiso medioambiental y social.

El diseño sostenible no es un concepto futurista, sino una realidad ya presente en muchos lugares de trabajo. La reducción del uso de impresoras, aparatos de aire acondicionado y electricidad mediante el uso de sensores de luz, la instalación de puertas automáticas y el uso de aseos automáticos, son buenas formas de reducir costes y ahorrar energía, y pueden ser importantes puntos de impulso para realizar cambios y crear empresas más sostenibles. Según un estudio de M. Moser, un diseño cuidadoso de las oficinas permite ahorrar entre un 20% y un 40%, si sólo se tienen en cuenta los aspectos relacionados con la calefacción y el aire acondicionado.

Por ello, se da espacio al mobiliario que utiliza materiales naturales que garantizan la salubridad y el bienestar psicofísico de las personas.

Las nuevas tendencias para amueblar la oficina

El año en curso está lleno de muchas nuevas tendencias en materia de mobiliario de oficina, un lugar en el que la gente suele pasar gran parte de su día. Por ello, tiene sentido amueblarlo con cuidado en todos los aspectos, incluido el mobiliario.
Uno de los aspectos a los que últimamente se les da mucha importancia a la hora de decidir amueblar una oficina es la elección de los colores, que son capaces de influir en los estados de ánimo y las percepciones humanas y hacer que los entornos de trabajo sean más o menos confortables.

En 2022, se imponen los tonos neutros de colores naturales que transmiten relajación, tranquilidad y energía. Entre ellos se encuentra el popular verde oliva utilizado para las paredes y el mobiliario de oficina, que aporta un nuevo toque a la rutina diaria, da positividad y naturalidad. Una alternativa al verde es actualmente el beige suave, que suele utilizarse como telón de fondo para elementos de decoración más inusuales. El azul y el amarillo también son colores de moda en el mobiliario de oficina, ya que crean un ambiente elegante y refinado, pero también enérgico y positivo, a la vez que transmiten mucha confianza.

Muchos arquitectos que diseñan oficinas modernas optan por la combinación del color blanco con la madera para crear ambientes con un estilo minimalista, elegante y contemporáneo.
Por tanto, la elección principal es la de los colores neutros que evocan elementos naturales, mejorando el estado de ánimo en la oficina y, en consecuencia, los niveles de productividad de los trabajadores, la atención, la motivación y la seguridad. Así es como el ser «verde» se afianza literal y figuradamente.

Los colores que elijas también influyen en el estilo con el que quieras amueblar tu oficina. El estilo clásico en el que se eligen muebles de tonos fuertes para crear un ambiente de autoridad y confianza es el evergreen. El estilo moderno, en cambio, prefiere los colores vivos o más suaves para crear un ambiente minimalista y refinado, utilizando también materiales de última generación, más o menos caros, que buscan el diseño industrial, con muebles modulares en colores oscuros y estructuras metálicas con sobres de madera que son a la vez bonitas de ver y prácticas de usar. La madera, el metal y el cristal son los materiales que, combinados o elegidos individualmente, dan a la oficina un aspecto actual; a estos materiales se une el cuero para los sillones y los accesorios de hierro, imprescindibles en este tipo de oficinas.
Los materiales como la madera y el vidrio en una oficina son prácticos y funcionales, y al crear líneas simples le dan un aspecto refinado.
Sea cual sea la tendencia estilística que elijas a la hora de amueblar tu oficina, es esencial mantener la homogeneidad y la consistencia entre los colores y los materiales. El mobiliario de oficina, que a menudo no se considera importante, debe seleccionarse cuidadosamente para que haga juego con el mobiliario y cree una sensación de uniformidad estilística. Entre los complementos de decoración que encajan bien con cualquier estilo se encuentran los accesorios de oficina de Caimi Brevetti como: perchas, cestas, paragüeros y accesorios de escritorio, diseñados para entornos colectivos que destacan gracias a un diseño que puede satisfacer las diferentes exigencias de gusto y uso personal. Objetos adecuados para espacios pequeños o grandes, minimalistas o de gran impacto. Hay también los espejos de cristal de Fiam que crean ambientes refinados o los extravagantes jarrones de Serralunga de los más variados colores y formas que hacen que los ambientes de trabajo sean enérgicos y acogedores.

La garantía Made in Italy actúa como punto de unión entre las diferentes opciones estilísticas. El cuidado y la perenne apuesta por la innovación y la calidad de los materiales hacen del Made in Italy algo a lo que pocos renunciarían.

Cómo amueblar una sala de reuniones

Hemos pasado los dos últimos años sin poder utilizar lo que siempre ha sido el centro neurálgico de una oficina: la sala de reuniones. La sala en la que se establecen las relaciones con el equipo, los clientes o los socios comerciales, la sala que enmarca las decisiones importantes para la empresa y que, junto con la recepción, sirve de tarjeta de visita.

Ahora que las actividades retoman su curso normal, la sala de reuniones vuelve a ser un lugar importante y necesario en una oficina. Pero, por supuesto, los requisitos han cambiado y ya podemos verlo en los medios de comunicación. Las reuniones de los líderes políticos se celebran en mesas finas pero de grandes dimensiones para mantener notables distancias entre los participantes y sillas cómodas para no desviar la atención del debate. Esto también se refleja en las pequeñas y grandes empresas.

Las reuniones siempre han sido un momento crucial en la actividad de las empresas y vuelven a serlo con fuerza, por lo que la sala de reuniones debe estar siempre bien pensada en todos sus detalles. El mobiliario, a través de las formas y los colores, debe tener una influencia positiva en las personas.

Veamos cuáles son los elementos fundamentales para amueblar una sala de reuniones:

La mesa es el elemento principal en torno al cual gravitan las estrategias empresariales. El tamaño de la mesa depende, naturalmente, de las dimensiones de la habitación en la que se va a colocar. Una de las nuevas tendencias es la mesa espaciosa, que puede garantizar que las personas estén muy espaciadas. Suele colocarse en el centro de la habitación.Otros aspectos importantes a tener en cuenta para la mesa son: las opciones para la gestión de los cables (los usuarios suelen conectarse a ordenadores, smartphones, etc.), el diseño, los materiales y los acabados (los hay para todos los estilos, de madera, de cristal, laminados, de cuero, etc.) y la forma (rectangular, cuadrada, circular).

Los asientos tienen que ser cómodos y estar diseñados para que la atención no se fije en la búsqueda espasmódica de una posición cómoda.

Muebles de archivo bajos en los que guardar el material útil para las reuniones

Accesorios de mobiliario que pueden mejorar el entorno y al mismo tiempo hacerlo más confortable. Entre ellos se encuentran los paneles fonoabsorbentes, ahora disponibles en colores y formas de gran diseño, que combinan funciones acústicas y decorativas; cortinas técnicas de oficina para modular la luz cuando se utilizan pantallas y, por supuesto, accesorios como percheros, paragüeros, portabolígrafos, papeleras, etc.

Por ello, la sala de reuniones debe garantizar el máximo confort, estimular la concentración y la productividad, y hacer que las personas que la ocupan se sientan a gusto.